sábado, 4 de julio de 2009

Tratamiento en Trastornos de Ansiedad (Inglés)

Más allá de lo que dice, si algunos no entienden inglés, vean cómo explican las técnicas que usan los psicólogos para manejar la ansiedad.

Trastorno por pánico, o T.O.C. o agorafobia, son todos Trastornos de Ansiedad, son condiciones que afectan muchísimo la calidad de vida de las personas, imposibilitandoles, por ejemplo. a salir de sus casas, o de ir al trabajo o universidad, o simplemente dejar de hacer cosas que le gustaría hacer.

Una de las técnicas más efectivas consiste en la exposición gradual: mientras más se exponga el sujeto al estímulo que le provoca ansiedad, con mayor probabilidad podrá superar su miedo, al darse cuenta que los mismos son infundados o exagerados.

"Valiente no es aquel que no tiene miedo, sino el que lo enfrenta"

Recordemos que lo patológico es la ansiedad extrema, no la ansiedad en sí. Hay personas con un grado alto de ansiedad aunque no patológica ya que no afecta en alto grado su calidad de vida: con estas personas se pueden usar diversas técnicas, como relajación y manejo del estrés.

Una Sesion de Psicoterapia

viernes, 3 de julio de 2009

La Personalidad

Hans Eysenk (1916-1997)
Este Psicólogo inglés teorizó acerca de que la Personalidad tiene 3 dimensiones. Hoy se amplió su teoría a 5 factores (Modelo Big Five)


Las Terapias Psicologicas, tal como se practica en el mundo hoy en día, están orientadas a resolver problemas concretos a un paciente. Un episodio depresivo, o maníaco, una crisis de angustia o mucha ansiedad son abordadas mediante técnicas cognitivas y conductuales variadas. La mayoría de los pacientes mejoran con este tipo de métodos. Ahora, hay veces en que no es tan fácil.

El sujeto adulto tiene determinadas características, una forma de ser, una "personalidad".
Pero, ¿Que es la personalidad?

Hoy en día se sostiene que la personalidad es un sistema de pautas duraderas de percibir, pensar y relacionarse con el mundo y con uno mismo (Echeburúa, 2002) El creador de la Terapia Cognitiva, Aaron Beck, diría que el sujeto tiene unos determinados "esquemas" o "creencias básicas", son el cristal por donde se interpretan todos los hechos de la realidad. Estos esquemas fueron desarrollados desde la niñez, y aquí coincide con Freud en que la niñez es la etapa más fundante del ser humano.

Como decíamos, la terapia se propone cambiar problemas concretos. Ahora, ¿qué pasa si el problema concreto pasa por la personalidad y no por un episodio aislado? ¿Qué pasa si los problemas de una persona vienen como consecuencia de una personalidad, digamos, conflictiva?

Bueno, aquí nos las veremos con un tratamiento más global, y por supuesto, más difícil. No se puede cambiar la personalidad de un día para el otro. Por eso se la aborda paso a paso. "Pequeños cambios pueden derivar en grandes avances"

De todos modos, debemos distinguir los rasgos de personalidad de algún trastorno de personalidad. Sólo se diagnostican como trastornos de la personalidad patrones de comportamiento inflexibles, desadaptativos y persistentes, que ocasionan un deterioro funcional o un malestar subjetivo significativos. (DSM IV, APA)

¿Cuales son los Trastornos de Personalidad?

Según el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales elaborado por la Asociación Americana de Psiquiatría (DSM IV de la APA) los trastornos elaborados hasta ahora (recordemos que están en constante estudio) son 10 y una categoría residual:

Grupo A:

-Trastorno Paranoide
-Trastorno Esquizoide
-Trastorno Esquizotípico

Grupo B:

-Trastorno Antisocial
-Trastorno Límite
-Trastorno Histriónico
-Trastorno Narcicista

Grupo C:

-Trastorno de la personalidad por Evitación
-Trastorno de la personalidad por Dependencia
-Trastorno obsesivo compulsivo de la Personalidad

Trastorno de la Personalidad no especificado (no entra en ninguna categoría de las anteriores)

La prevalencia, o sea, la probabilidad de aparición de estos casos en la Consulta es relativamente bajo, con un porcentaje que varía desde 0.5% a 10%, depende el trastorno.

lunes, 29 de junio de 2009

Ansiedad y Control

Les quiero mostrar un extracto de una nota muy interesante del Dr. Daniel Bogiaizian
Presidente de la Asociación Ayuda
www.asociacionayuda.org

Esta nota trata sobre la Ansiedad y la necesidad de control que experimentan algunos pacientes.


CONTROLADORES

¿Puede ser el control un problema?

Para poder manejar situaciones las personas nos valemos del control, entendido como la posibilidad de hacer que las cosas sigan el sentido que queremos.El control es un concepto multifacético y complejo, con más de 100 términos que aluden al mismo y a formas de ejercerlo. Supervisar, chequear, asegurar, planificar, son algunos de los ejemplos que aluden a tareas vinculadas con lo laboral. Nuestra intuición nos hace pensar que el control es positivo y es cierto que el bienestar personal requiere de un grado indispensable de control.

¿Pero qué ocurre cuando el deseo de controlar es tan alto que nos impulsa a desconocer los límites de nuestras posibilidades?La respuesta es que la ansiedad aumenta, ya que las posibilidades de fracasar por no poder cumplir con expectativas muy exigentes plantean una amenaza.

Que quiere decir el Dr Bogiaizian con esto?

La conclusión a la que queremos arribar es que cuando queremos tener el control de que todo salga bien, de hacernos cargo de todo lo que ocurre a nuestro alrededor, terminamos tendiendonos una trampa. Al querer controlar la ansiedad, ella nos invade.

Lic. Laura Valdez

sábado, 20 de junio de 2009

Como combatir el estres

El Estres es la punta de un iceberg. Es cuando nuestro cuerpo dice basta por la sobre carga que debe experimentar diariamente.

El estilo de vida, las presiones impuestas por terceros y autoimpuestas, la comida y los hábitos de ejercicio (existentes o no) acumulados durante una cantidad importante de años pueden volvernos en contra.

Aqui les presento una serie de consejos para atenuar los impactos del estres en nuestra vida diaria, fijense que uno puede operar sobre muchas cosas mas de las que parecen: puede operar sobre los propios pensamientos, sobre nuestro cuerpo y sobre nuestro hogar. Vea:

Nuestros pensamientos

-Organice mejor su tiempo: muchas veces nos sentimos agotados y nos quejamos por falta de tiempo, pero ¿nos estamos organizando bien? ¿Separamos las prioridades de las minucias?

-No crea que su estres se debe exclusivamente a factores externos: es Usted el que puede desafiar las adversidades haciéndole frente.

-Ante sintomas excesivos de ansiedad, no se deje vencer: consulte con un profesional para que le enseñe tecnicas de control de estres. No evite las situaciones, es necesario enfrentar el miedo.

-Identifique sus pensamientos negativos y pongalos a prueba: "¿Este trabajo realmente es imposible de hacer? ¿Es cierto que no soy lo suficientemente fuerte para salir adelante?" Ellos son muchas veces la causa de nuestro malestar.

Cuide su cuerpo, lo acompaña toda la vida

-Deje de fumar. Recientes estudios vinculan la ansiedad con el tabaquismo. Le haremos un favor no solo a nuestra salud mental sino a nuestros pulmones.

-Reduzca el consumo de alcohol. Aunque parezca que nos relaja, tambien contribuye a incrementar la ansiedad.

-Realice actividad fisica: el ejercicio fisico reduce la ansiedad, proyendo un efecto tranquilizante al organismo, mejora nuestra autoestima y nos ayuda al dormir. No existe mejor elixir. Camine, trote, practique yoga o artes marciales.

Y por casa como andamos?

-Comuniquese con sus familiares cuando se sienta estresado, ellos lo escucharán y sobre todo lo ayudarán a conseguir un profesionales si Ud. no se siente bien.

-Mantenga el orden y la limpieza en su hogar, organizando las tareas diarias de forma sencilla

-Escuche musica y abra las ventanas. Si entra un rayo de sol, mejor.


Lic. Laura Valdez

miércoles, 17 de junio de 2009

Ansiedad, esa rara sensacion

Ansiedad

Usted experimenta?

· Mareos?
· Palpitaciones?
· Miedos irracionales?
· Pensamientos o creencias obsesivas?
· Angustia en lugares cerrados o públicos?

Entonces Ud. podría estar lidiando con un trastorno de ansiedad.

Los desórdenes de ansiedad corresponden al primer lugar en trastornos de la salud mental en los Estados Unidos (es el país con mejores datos estadísticos sobre salud mental). Se estima que un 10% de la población adulta norteamericana sufre o ha sufrido algún trastorno de ansiedad. La frecuencia también crece entre niños, y contribuye a la ya creciente desconexión social entre las personas (aumento de las tasas de divorcio, baja en la tasa de natalidad, cada vez más gente vive sola, etc.).

Sin embargo, a pesar de la alta tasa de ocurrencia, vemos que muchas de las personas tienen miedo o se avergüenzan de hablarlo o de acudir a la consulta médica.

La ansiedad es una respuesta normal del ser humano, frente a situaciones que amenazan nuestra integridad: por ejemplo: si estamos caminando por la selva y vemos una víbora, seguramente nuestro cuerpo se preparará para huir o para enfrentar a este no muy simpático amigo. Cuando esta respuesta se generaliza hacia otras situaciones que no representan un peligro real estamos hablando de ansiedad no adaptativa. Por ejemplo, cuando tenemos que rendir un examen escrito en la escuela.

Hay distintos tipos de trastornos de ansiedad, como crisis de pánico, agorafobia, fobias específicas, ansiedad social, trastorno de ansiedad generalizada, pero más allá del diagnóstico, aquí les presento lo que no habría que hacer si Ud. desea manejar la ansiedad:

Factores que mantienen la ansiedad alta:

· Comportamiento evitativo: Recuerde, evitar una situación no lo ayuda sino que por el contrario, perpetúa el conflicto.

· Pensamiento negativo: si estamos todo el día pensando lo peor, esto nos asusta cada vez más.

· Creencias distorsionadas sobre nosotros mismos: estas creencias “nucleares” negativas hacen que pensemos negativamente. Es necesario hacer un abordaje profundo para indagar y refutar estas creencias.

· Negar los sentimientos: si negamos lo que sentimos (enojo, frustración, miedo) sólo sentiremos más ansiedad. Sería bueno aprender a expresar los sentimientos.

· Falta de asertividad: se puede ser capaz de expresar honestamente y respetuosamente los sentimientos (sobre todo el desacuerdo)

· Tensión muscular (al endurecerse éstos se rigidizan los músculos de la respiración favoreciendo la hiperventilación e intensificando los síntomas)

· Mala alimentación (sobre todo el café y la comida chatarra que no son nutritivos)

· Estilo de vida estresante (no saber lidiar con los problemas, consumo de alcohol y drogas)

· Falta de objetivos personales (puede asociarse también con depresión)

Se deben trabajar sobre estos puntos para poder mejorar nuestra calidad de vida.

Y lo más importante, y la clave de todo es que
LA ANSIEDAD NO SE ELIMINA: SE MANEJA.

Adaptado de “Living Well with Anxiety”:
what your doctor doesn´t tell you… that you need to know
De Carolyn Chambers Clark
Harper-Collins E-books

Lic. Laura Valdez
Psicóloga
www.la-psicologia-hoy.blogspot.com

sábado, 6 de junio de 2009

La Terapia Cognitiva

Aaron T. Beck

Creador de la Terapia Cognitiva







La Terapia Cognitiva es un abordaje psicoterapéutico creado por Aaron T. Beck, en la década de 1960, en Estados Unidos.

Este modelo terapéutico se basa en el principio de que las conductas, los pensamientos y las emociones de una persona están íntimamente relacionados. Principalmente, que nuestros pensamientos (las cogniciones) van a influir directamente en las emociones que vamos a experimentar en distintos momentos de nuestra vida.


Entonces, lo que pensamos repercutirá de una forma directamente proporcional sobre cómo nos vamos a sentir, o sea, la emoción que experimentaremos en ese momento. Por último, de acuerdo a los pensamientos y las emociones que experimentemos, vamos a realizar conductas que sean coincidentes con éstos.

Para que sea más claro, presentamos una situación que describirá cómo se conectan estos tres planos:

“En la calle, un hombre se aproxima caminando y cuando pasa al lado nuestro, nos lleva por delante. Ante esto, sigue caminando como si nada hubiera pasado y sin pedir disculpas por lo ocurrido.”

Ante esta situación, hay varias maneras en que podemos reaccionar. ¿Qué hubieras hecho tú en esta situación? Veamos algunas posibilidades y luego intenta identificarte con alguna de ellas:

1) Podemos pensar: "¡Que maleducado este hombre!, ni siquiera pidió perdón"

2) Podemos pensar: "Soy tan insignificante que las personas ya ni se percatan de mi existencia. Nada bueno va a pasarme en mi vida"

3) O podemos pensar: "¿Qué le estará pasando a este hombre para que no se dé cuenta que me acaba de llevar por delante? ¡Pobre!, debe estar muy abrumado"

Imaginemos cómo nos sentiríamos, o sea, qué emoción tendríamos para cada uno de estos pensamientos. ¿Enojo, Irritación? ¿Angustia, desesperanza? ¿Compasión, Entendimiento? Sería normal que, para el primer pensamiento, se desprenda enojo, para el segundo, angustia, y para el tercero, tengamos un sentimiento de comprensión y empatía hacia el otro.


¿Podría ser que estemos equivocados? ¿Es posible que se conecten de otra manera?


Por ejemplo, ¿se podría en base al primer pensamiento, sentir “compasión”? Suena raro, ¿verdad? Esto es porque los pensamientos siguen una forma de producción en la que expresamos nuestras creencias más básicas sobre las cosas que nos rodean, y a veces formulamos estos pensamientos de forma que “moldean” nuestros estados de ánimo.


Tomando estos ejemplos, vemos entonces que efectivamente, la forma en la que pensamos, influye en nuestras emociones y en nuestras conductas, y por consiguiente, en nuestra forma de encarar el mundo y la vida.

A veces, tenemos pensamientos más adaptativos y racionales, pensamientos que nos ayudan a superarnos día a día y que no permiten que la adversidad nos debilite. Por otro lado, hay pensamientos menos racionales, o distorsionados, más desadaptativos, y que son dañinos para nuestra persona y para los demás. Cuestionar la veracidad de estos pensamientos distorsionados negativos va a ser el objetivo principal de nuestro trabajo en la Terapia Cognitiva.


Haciendo esto podemos llegar a descubrir algunas cosas interesantes y generar pequeños cambios que pueden ayudar y mejorar la vida de una persona.


La Terapia Cognitiva es el método psicoterapéutico que más ha sido investigado en los últimos 40 años, y que ha demostrado ser uno de los más eficaces para abordar problemas tan comunes como la ansiedad y la depresión.


El dispositivo es similar al de otros tipos de psicoterapia, con la característica de que el terapeuta es más activo, directivo, y propone desafiar los pensamientos del paciente que le están causando problemas en su vida, mediante diversas técnicas y herramientas terapéuticas, para generar cambios beneficiosos en el menor tiempo posible.

Por Laura Valdez
Psicóloga
Correspondencia a lvaldez@psi.uba.ar



miércoles, 13 de mayo de 2009

Las Habilidades Sociales



¿Qué son las habilidades sociales?

Todos nos encontramos alguna vez en nuestra vida con situaciones difíciles de manejar en distintos ámbitos: en el trabajo, la escuela o facultad, lugares de consumo o de ocio, en transportes públicos, o en nuestros hogares. Estas dificultades muchas veces tienen que ver con nuestra forma de relacionarnos con los otros: malos entendidos, comentarios o fallas en la comunicación pueden jugarnos en contra.

Pasamos todo el día interactuando con personas, preguntando y respondiendo, divirtiéndonos y discutiendo. Con amigos, con la familia, con los vecinos, etc.
¿Ahora, se ha puesto a pensar cómo Ud. se relaciona con los otros? ¿Ha sospechado tener problemas en la comunicación con conocidos? ¿Cómo se comporta Ud. en una discusión (de ideas)? ¿Puede exponer su punto de vista y escuchar el del otro?
Todas estas son preguntas que nos hablan del grado de habilidades sociales que uno posee.

Las habilidades sociales son, pues, el conjunto de hábitos o conductas que nos permiten mantener eficazmente nuestras relaciones con las demás personas. Le permiten a la persona resolver problemas inmediatos y simultáneamente reduce la posibilidad de la aparición de futuros problemas.

Algunas áreas de las habilidades sociales son:

Iniciar y mantener conversaciones
Hablar en público
Expresión de amor, agrado y afecto
Defensa de los propios derechos
Pedir favores
Rechazar peticiones
Hacer cumplidos
Aceptar cumplidos
Expresión de opiniones personales, incluido el desacuerdo
Expresión justificada de molestia, desagrado o enfado
Disculparse o admitir ignorancia
Petición de cambios en la conducta de otros
Afrontamiento de las críticas


Piense cómo Ud. se desenvuelve en cada una de estas situaciones. Algunas pueden ser más dificultosas por naturaleza, como el hablar en público o rechazar peticiones. Hay una frase de un libro muy jocosa que dice: “Cuando digo NO me siento culpable”

Subrayamos el concepto de “habilidades” sociales ya que las habilidades se adquieren por aprendizaje, se modelan y como dijimos, se “entrenan”, así como sería con cualquier otra habilidad (andar en patines, nadar, tocar un instrumento, etc.) Si no han sido enseñadas durante la infancia, nunca es tarde para empezar en la adultez.


Lic. Laura Valdez

sábado, 2 de mayo de 2009

El Estres: epidemia del Siglo XXI

“Estoy estresado/a”: vemos que todos los días las personas repiten esta frase para referirse a un estado de cansancio, agotamiento y malestar psíquico o físico que perjudica la calidad de vida.

“Me siento nervioso”, “Estoy todo contracturado”, “Me cae mal la comida”, “Me enfermo muy seguido”, “No me puedo concentrar en el estudio/ trabajo” son algunos de los síntomas de estrés agudo o crónico que podemos observar los que nos dedicamos a la Salud Mental.

Pero, ¿Qué queremos decir cuando hablamos del “estrés”? Y lo más importante: ¿Cómo podemos identificar las causas del mismo para así amortiguar el impacto negativo que ejerce en nuestra vida?

Originalmente el término estrés aparece en el siglo XIV, viene del latín strictus (presión) y deriva en del térmico inglés STRAIN, cuya definición es la que sigue: “una presión que se ejerce sobre algo o alguien ya que tiene demasiadas cosas de las que debe encargarse, o algo realmente muy difícil de resolver para los recursos de que dispone” Señalamos dos palabras: presión y recursos, conceptos clave para entender cómo funciona. Hay estrés cuando hay demasiada presión, pero esa presión: ¿es la misma para todos? La respuesta naturalmente, es no.

Las últimas investigaciones psicológicas arrojan de que no existe una sola causa para que alguien sufra de estrés, sino que es producto de la interacción de la persona con su contexto. Las personas son más o menos vulnerables al estrés y esto viene condicionado por su historia de vida pero también entran en juego variables socioculturales y cómo se desenvuelve el sujeto en ellas.

Esto quiere decir que lo que para una persona es estresante, para otra puede no serlo: depende de cada uno y del contexto en que esté. La presión se siente cuando las demandas del ambiente superan la capacidad de recursos que posea la persona para manejarla. También puede suceder que esta persona posea los recursos pero que no sepa que los tiene, y esto naturalmente impactará de manera negativa, creyendo que no puede “hacerle frente” sufrirá las consecuencias de esta presión.

Un concepto clave es el de los recursos: cuantas más habilidades demuestre la persona para afrontar ciertas situaciones que pueden ser estresantes, con más éxito podrá manejar el estrés. Y esto, si no viene “de fábrica” hay tratamientos psicológicos diseñados para desarrollarlas.

Por eso hoy en día se está hablando de la prevención: los psicólogos utilizan y potencian las fortalezas de sus pacientes e intentan analizar y disminuir los comportamientos más nocivos para la salud. Esto se puede abordar mediante un trabajo en conjunto, y la palabra “trabajo” es real: el paciente y el terapeuta tendrán que poner mucho de sí mismos para lograr un tratamiento exitoso.

Lic. Laura A. Valdez Web www.la-psicologia-hoy.blogspot.com
Psicóloga UBA Consultas lvaldez@psi.uba.ar

jueves, 9 de abril de 2009

Los Psicólogos en la Argentina


EL LUGAR DEL PSICOLOGO EN LA ARGENTINA


En un estudio realizado por el Lic. Modesto Alonso, establece que la cantidad de psicólogos graduados de Universidades argentinas es cada vez mayor, llegando a calcularse que en este momento, en la Capital Federal, hay 1 psicólogo cada 649 habitantes (2006) y que la mayoría de ellos se desarrolla laboralmente en el área clínica.


Esto redunda en que nuestro trabajo debería, lejos de seguir especializándose en un plano que ya se encuentra saturado (fundamentalmente por psicoanalistas), especializarse hacia otros campos. Hay varios, pero los principales serían el forense, laboral, educacional, etc. pudiendo desempeñar las funciones de docencia e investigación de manera paralela.


LA FORMACION ACTUAL, LAS FALENCIAS DEL SISTEMA


También vemos que el marco teórico predominante es el Psicoanálisis, marca registrada de los egresados de la UBA, pero también se deben adquirir conocimientos que estén a la altura de los grandes centros científicos del mundo, siendo un deber de las universidades poner al servicio del alumno, toda la información más actualizada para alcanzar a un rigor y excelencia académica.


En este momento el paradigma de la Psicología sigue el rumbo de la rama Cognitiva y las Neurociencias. Es un modelo que lo usan todos los países del mundo, menos la Argentina. Incluso países hermanos nuestros como Chile, Uruguay y Brasil centran la formación bajo esta escuela.


Sería lo recomendable que el estudiante de Psicología comience a investigar desde el inicio de la carrera, qué campos o áreas tiene y experimentar en ellas mediante seminarios o prácticas institucionales para orientarse, para así también poder facilitar su inserción laboral una vez graduado.


Invito a que todos los que me visiten me dejen sus opiniones!!!